¿Como tengo que cuidar mi piel durante la exposición al sol?
Ya conocemos los riesgos de las radiaciones de nuestro amigo sol. Pero no todo son factores negativos. El sol tiene efectos muy positivos en nuestro organismo si lo tomamos con las debidas precauciones. Un bonito paseo en un día soleado puede cambiar nuestro estado de ánimo haciéndonos sentir más felices y vitales. Un día en el mar o en la montaña nos ayuda a tener unos huesos más fuertes gracias a la síntesis de vitamina D, que sólo es asimilable gracias a él.
Hoy además, queremos hacer hincapié en el uso adecuado de los protectores solares. No todos son iguales, ni nos protegen de la misma manera.
Os contamos las ventajas de utilizar SOLARES CON INGREDIENTES NATURALES. Son mucho más suaves con tu piel y sus ingredientes con filtros físicos son mejores ya que eliminan todos los componentes químicos que producen un alto riesgo de alergias e irritaciones.
¿Cómo se consigue la protección con filtros físicos?
Se trata de utilizar “barreras» que se consiguen con el uso micronizado de dióxido de titanio, por ejemplo, capaz de eliminar casi totalmente los rayos UVA y UVB.
Este sistema de filtro, inerte, no se modifica químicamente, sino que actúa en la superficie de la piel por un mecanismo físico, según el cual, estas macromoléculas se comportan como pequeños espejos, reflejando inmediatamente la radiación por dispersión, y evitando así los fenómenos de intolerancia. Nos encanta lo natural, y que tengan vitaminas e ingredientes como la cascara de nuez, la granada, el aceite de sandía, karanja, frambuesa y vitamina E. Para los más tipos de solares más densos, tipo stick, le añaden manteca de aceite de oliva. Como veis, todo muy saludable.
>>No contienen metales pesados<<
Para los primeros días de exposición en conveniente usar solares con factores altos como 50 o 30 e ir repitiendo su aplicación de manera frecuente.
Si estás en tratamiento de quimioterapia, no es aconsejable que tomes el sol ya que tienes un alto riesgo de foto sensibilidad y aparición de manchas o irritaciones. Te recomendamos el uso continuado de leches o cremas solares durante el tratamiento, aunque sólo te de un poco el sol por la calle. Si decides pasar algún día en la playa o montaña hazlo con precaución.
Para la cara te recomendamos varias opciones. Actualmente se han desarrollado cremas faciales hidratantes con color que unifican el tono de la piel, te protegen y algunas hasta son antimanchas ¿increíble, no?
Solar facial antimanchas de Apivita:
Para el cuerpo tienes varias opciones adecuadas a tu tipo de piel, como son las leches hidratantes corporales .
También existen en spray, para las más perezosillas que no quieren perder mucho tiempo ni esfuerzo en su aplicación. ¡Di que si! La comodidad ante todo.
Tan importante es protegerse previamente, como hidratar tu piel después de la exposición solar. Los productos Post solares o after sun, están formulados para hidratar, calmar y recuperar la piel lo máximo posible. No olvides darte una ducha suave e hidratante después de un día de sol. Hazlo con un gel de ducha adecuado que además de eliminar los restos de sal, te hidrata, mantiene el bronceado por más tiempo y recupera tu piel. Sus ingredientes son una fórmula mágica para las pieles irritadas porque llevan proteínas de almendras dulces, ácido hyalurónico, aceite de sandía, karanja y frambuesa. Además de manteca de murumurú, aceite de babassú y aceite de jojoba.
Aplica después una crema post solar o after sun de las mismas características y verás como tu piel se recupera y se mantiene protegida por más tiempo.
No dejes de utilizar los sticks de alta protección 50 en las “zonas conflictivas”, aquellas que por su posición, los rayos inciden de manera directa como son: Nariz, pómulos, escote…