La elección de una peluca puede ser a veces difícil, generalmente porque es un producto que desconocemos.
Hoy en día, por diversas causas, podemos necesitar usarlas de manera temporal o permanente. Sabemos que tenemos dos tipos de pelucas, las pelo natural (pelo humano) y las de fibra sintética.
¿Qué tengo que saber para elegir una peluca de pelo natural?
Las pelucas de pelo natural son fabulosas y muy reales a nuestro cabello, pero hemos de saber algunas cosas antes de comprarlas.
El pelo natural es un producto escaso y por ello muy cotizado y caro. Este cabello humano de utiliza para prótesis, pelucas y extensiones.
¿Qué debo tener en cuenta al elegir una peluca de pelo natural?
– Debe tener un sello de garantía de cabello REMY y CE (adjunto fotos)
– Marca o firma del fabricante para asegurarnos de que el cabello ha sido tratado y preparado para la implantación siguiendo las medidas de higiene y desinsectación. (adjunto firma Ellen Wille)
– Interior adaptable y en caso de que sea una peluca oncológica, que no necesite del uso de adhesivos. Los adhesivos son irritantes para piel.
El cabello Remy nos garantiza que no se va a enredar y quedará suelto y suave durante su uso y también cuando la lavemos.
El cabello Remy nos indica que el cabello ha sido implantado en la peluca en la misma dirección que se ha recogido. Es decir, raíz con raíz y puntas con puntas.
Si se mezcla la raíz con las puntas, entonces se enreda, encrespa y pierde valor, por lo que tendríamos que pagar menos por una peluca que no es Remy.
La marca del fabricante y el etiquetado son garantía de fabricación, etc…
Estos datos son necesarios para nuestra seguridad, sobre todo por higiene, teniendo en cuenta de que, en muchos casos, desconocemos el origen de ese pelo.
Pelucas como las de la firma Ellen Wille nos ofrecen todas estas garantías de fabricación.
Los fabricantes pasan numerosos controles de calidad e higiene con el cabello para darnos todas las garantías y deben llevar el sello CE.
La pelucas de dudosa procedencia o fabricación artesana no tienen estas garantías. Hemos de pensar que es cabello de otra persona y ha de ser tratado, limpiado, descamado y procesado para su uso en otras personas.
Además del pelo, otro factor a tener en cuenta, es el interior de la peluca. Actualmente contamos con una fabricación muy fina, pelo a pelo, que nos da mucha transpiración e imita perfectamente el cuero cabelludo.
Las pelucas de pelo natural pueden estar hechas a mano o llevar parte a mano y parte a máquina.
Las pelucas hechas a mano pelo a pelo, son más cotizadas porque el acabado es más natural y llevan más horas de trabajo manual, por eso su precio es más elevado.
Si eliges una peluca de pelo natural hecha a mano, estás eligiendo bien, pero si prefieres gastar un poco menos también tienes las pelucas hechas a máquina, eso si, el precio es mucho menor, por lo que compara antes de comprar.
Las pelucas de pelo natural y con parte del interior a tiras o a máquina, no deberían superar los 700€ si es un pelo largo y los 500/600€ si es un pelo corto.
Una peluca de pelo Remy hecha a mano en cabello largo suele tener un precio medio de 1200€ y entre 900 y 1000€ si es más corto.
Interior hecho a mano
Interior hecho a máquina
Otro factor indispensable a la hora de elegir una peluca es el estado de la piel.
Durante los tratamientos oncológicos la piel está mas sensible y se irrita con facilidad, por lo que quedan desaconsejados los adhesivos para fijar la peluca o prótesis.
Durante los procesos oncológicos la piel deja de regenerarse, por lo que evitaremos utilizar productos agresivos como los adhesivos y disolventes para fijar la peluca.
Para poder despegar estas pelucas “pegadas” deben utilizar un disolvente que limpia el adhesivo, lo cual ya es irritante.
Una vez despegadas hay que limpiar los restos de la piel, por lo que seguimos agrediendo la piel, y por fin, vuelven a poner de nuevo los adhesivos y pegamentos para que se fije durante otros 7 o 15 días, en el peor de los casos.
Al retirar estos restos de adhesivos y pegamentos están eliminando parte de la capa de la piel que está en contacto con estos adhesivos y , teniendo en cuenta que durante la quimioterapia, la piel no se regenera, estarían favoreciendo una irritación, desgaste e hipersensibilización de la piel.
Estas pelucas que llaman “oncológicas” y que se llevan fijas, “pegadas con pegamentos” son las menos indicadas para los pacientes oncológicos.
Además, generalmente, se necesita un mantenimiento semanal para poder limpiar el cuero cabelludo que no se ha lavado ni hidratado en 1 semana o incluso más tiempo.
Estas pelucas no se pueden quitar para dormir, por lo que resultan más incómodas.
Hay que evitar estas pelucas o también llamadas prótesis oncológicas a medida que impiden una higiene adecuada diaria.
Estas “pseudopelucas oncológicas” suelen ser además bastante caras y su precio es de entre 1400 y 1900€.
Actualmente se ha innovado en los interiores de las pelucas y se ha conseguido un ajuste elástico que se adapta perfectamente a la cabeza.
Este ajuste elástico ofrece mucha independencia a la paciente, ya que puede poner y quitar la peluca cuando lo desee facilitando el cuidado y la correcta higiene la piel durante la quimio.
En cualquier caso es más adecuado y seguro utilizar una peluca elástica que se ajuste con gomas y antideslizantes.
Comodidad, seguridad, un mantenimiento razonable y buena relación calidad precio es lo que debemos tener en cuenta cuando vayamos a comprar una peluca oncológica de pelo natural.