En ocasiones y sin motivo aparente podemos notar molestias en el cuero cabelludo.
Signos como tirantez, dolor en puntos concretos, sensibilidad al tacto, enrojecimiento, picor y e incluso a veces sequedad.
Todos estos efectos pueden ser debidos a múltiples factores.
Uno de ellos puede ser una reacción alérgica o sensibilidad a algún producto que nos hayamos puesto.
Es posible que si nuestra piel es sensible, el cuero cabelludo quede más expuesto a la reacción de productos como champús agresivos con detergentes sintéticos que irritan la piel.
La piel del cuero cabelludo es más fina que el resto del cuerpo, por eso debemos tratarla con mucho cuidado y usar productos suaves.
Otro factor que puede sensibilizar nuestro cuero cabelludo es la radiación solar, por eso, si vamos a exponernos al sol, debemos cubrir la cabeza con una gorra, pañuelo o sombrero.
En los casos de sensibilidad por radiación solar se suele acompañar después por picor, células muertas y piel descamada.
Un factor muy habitual del cuero cabelludo sensible es el estado de nerviosismo o estrés.
En el cuero cabelludo tenemos innumerables terminaciones nerviosas que acompañan a nuestros folículos pilosos.
Cuando tenemos temporadas o momentos de estrés se acumula una gran tensión que en muchas ocasiones produce dolor en determinados puntos.
En estos casos, un masaje en el cuero cabelludo y el cuello alivian mucho y activan la circulación sanguínea.
La acción de determinado procesos químico-técnicos también es uno de los factores que lo sensibilizan.
Permanentes, tintes con PPd o amoníaco, decoloraciones y productos químicos agresivos en nuestro cuero cabelludo, lo dejan desprotegido, irritado y sensibilizado.
Durante la pérdida de cabello por tratamientos oncológicos, también se observan molestias en la raíz de pelo.
Estas molestias en la raíz son provocadas por la pérdida masiva de cabello, por lo que una vez rasurado las molestias suelen ir desapareciendo.
Abusar de peinados como trenzas o recogidos muy tirantes, también son una de las causas que suelen favorecer el cuero cabelludo sensible, por lo que debemos evitarlos.
¿Cómo podemos tratar la piel y el cuero cabelludo sensible?
Debemos desechar champús con detergentes sintéticos, ftalatos, siliconas, Sls, parabenos, sulfatos…
Miraremos que el champú sea para cuero cabelludo sensible, por ejemplo con manzanilla, miel, aloe, Hialurónico, caléndula, lavanda…
En el lavado, usaremos agua que no esté excesivamente caliente ni fría, templada es lo más adecuado para la piel.
Daremos un suave masaje circular sin poner un exceso de champú y aclararemos. En la segunda pasada dejaremos actuar la espuma durante 3/5 minutos para que haga su efecto.
Una vez aclarado y acondicionado, podemos aplicar una loción adecuada a nuestro cuero cabelludo o un fortalecedor.
A veces, a irritación del cuero cabelludo también se acompaña de caspa o descamación que podemos tratar a la vez aplicando los productos adecuados.
Esta descamación del cuero cabelludo a menudo produce picor, por lo que evitaremos rascarnos y aplicaremos lo necesario para aliviar el picor sin agresiones.
⇓Os dejo 4 Productos que funcionan muy bien en estos casos⇓
CHAMPÚ ANTICASPA SECA Y PICOR
CHAMPÚ CUERO CABELLUDO SENSIBLE
ACEITE ANTICASPA CALMANTE
LOCIÓN REVITALIZANTE PARA MUJER